Un propósito mayor

Tú nos formaste, nos creaste de manera perfecta. Cada célula, tejido, órgano, cada cabello y nervio; cada parte de nuestro cuerpo fue diseñada por tu maravilloso poder divino, Padre Eterno.

 

Y más allá de un corazón que late; más que un cuerpo físico, nos diste espíritu, mente y esa esencia única que nos diferencia de los demás. ¡Somos únicos! irrepetibles, creados por tu inmenso amor; nos diseñaste muchísimo tiempo antes de nuestra concepción, ¡Nos diste aliento de vida! Nos regalaste personalidad, una forma especial y propia de percibir el mundo, nos hiciste a imagen y semejanza tuya. Depositaste en nosotros sueños, emociones, inteligencia, creatividad y una semilla de Fe la cual debemos trabajar siempre. ¡Nos hiciste capaces de amar!  ...de expresarnos, de perdonar, de sentir y razonar. ¡Wow!  ¡Qué infinidad de cosas nos has dado!  ¡Cuán perfecta es tu obra! Y no siendo suficiente, también nos diste dones espirituales, tu palabra viva, habilidades y talentos.  Todo esto con un propósito.

 

Somos parte de tu perfecta creación, y cómo parte de la misma tenemos un propósito. Todo lo que nos diste es parte de un plan mayor.  Y es nuestro deseo entender ese fin; ese motivo . ¿Qué esperas de nosotros? ¿Para qué somos buenos? ¿Cómo quieres usarnos?

¡Somos tus herramientas! ¡Tus instrumentos!

 

Por eso debemos buscarte Padre Eterno, es nuestro misión acercarnos a ti y conocer cada vez más a Jesucristo, a tu Hijo; al Maestro excelentísimo. 

Maestro, enséñanos a entender quiénes somos ante el Padre Eterno, para así comprender cómo hacer su voluntad.

 

Así cómo un joven trabajador pide instrucción a personas entendidas sobre el uso de herramientas para labrar la tierra, ayúdanos Maestro a pedirle al Padre esa guía espiritual necesaria para comprender cómo hacer uso efectivo de las herramientas y talentos recibidos. Y al mismo tiempo, mantener presente que debemos abrirnos espiritualmente en Fe y obediencia para que Abba Padre nos limpie y use cómo sus instrumentos.

 

Úsanos Abba, cómo tus instrumentos.  Y así cómo David interpretaba melodías para alabarte, que nuestra vida sea de disposición para que nos uses y hagas música agradable con nosotros conforme al propósito por el cual nos formaste. Romanos 6:13

Confiamos en que vas a lograr tu propósito en nosotros. ¡Que el Espíritu Santo nos guíe y que tu amor nos proteja y cuide por siempre!

 

 Amén.